Ahora bien, cuando hablamos de Ciencias Sociales nos referimos a una serie de disciplinas que comparten un denominador común: el estudio del hombre, la organización colectiva, las estructuras sociales y las relaciones entre seres humanos, la forma en que se produce y reproduce la sociedad y el sujeto mismo. Cada Ciencia Social tiene un objetivo específico de estudio.
Las ciencias sociales son disciplinas intelectuales que estudian al hombre como ser social por medio de métodos científicos. Tienen un enfoque específico hacia el ser humano como miembro de la sociedad y sobre los grupos y las sociedades que forma. Su alcance es tal, que permiten hacer predicciones en cuanto a determinados comportamientos o tendencias sociales incorporando herramientas matemáticas y estadísticas.
La multidisciplinariedad es un elemento clave para entender el funcionamiento de las Ciencias Sociales. Los límites entre cada disciplina como por ejemplo
la Sociología, la Ciencia Política, la Antropología, la Economía, la Pedagogía o la Psicología, muchas veces son difusos y se conectan por múltiples aristas.
Esto ocurre porque estas ciencias buscan generar respuestas a un sinfín de problemáticas sociales por lo que requieren de una apropiación de las herramientas o categorías de análisis que otras Ciencias Sociales construyen.
Las ciencias sociales pueden dividirse en aquellas dedicadas al estudio de la evolución de las sociedades (arqueología, historia, demografía), la interacción social (economía, sociología, antropología) o el sistema cognitivo (psicología, lingüística). También puede hablarse de las ciencias sociales aplicadas (derecho, pedagogía) y de otras ciencias sociales agrupadas en el genérico grupo de las humanidades (ciencias políticas, filosofía, semiología, ciencias de la comunicación).
Cabe destacar que las ciencias sociales pueden estudiar las intenciones declaradas y consientes de las personas, pero también el comportamiento observado.